Durante una conferencia de prensa en el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM), Montenegro expresó su postura firme frente al paro, afirmando que no pagará a los empleados municipales más de lo que el municipio pueda costear sin aumentar los impuestos para los ciudadanos.

El intendente destacó su disposición a asumir el costo político de sus decisiones y criticó el momento elegido para el paro, que coincide con el regreso de las vacaciones de Semana Santa y un paro docente. Montenegro considera que el paro no es el inicio adecuado de una negociación paritaria y que debería ser el último recurso, no la primera opción.

En cuanto a las demandas salariales, el sindicato de trabajadores municipales reclama una recomposición del 35%, mientras que el gobierno ofrece un 10% de aumento, lo que ha generado el descontento y la movilización de los empleados.

Montenegro subrayó su compromiso con la administración responsable de los fondos municipales y su determinación de no jugar con el dinero de los contribuyentes. Insistió en la importancia del diálogo, pero dejó claro que no tolerará acciones que considere irrazonables por parte de los sindicatos.

El intendente concluyó reafirmando su deber de cuidar los intereses financieros de los residentes de Mar del Plata y su negativa a comprometer la estabilidad económica de la ciudad.