Caballero explicó que la normativa, enmarcada en la Ley de Memoria Democrática, entró en vigencia en 2022 y, tras una prórroga, concluye definitivamente este año. "El hecho de ponerle fecha final a esta ley ha hecho que se produjera esta avalancha de descendientes que vienen a obtener la nacionalidad española", remarcó. Según precisó, solo en el consulado de Buenos Aires ya se registraron 650.000 expedientes, lo que genera una fuerte demanda y plazos que podrían extenderse durante años.

El especialista subrayó que lo más urgente es obtener el código de identificación único (IDU) antes del vencimiento del plazo. "Hay que reunir las condiciones y contar con la documentación, porque sin los papeles no se puede demostrar la descendencia", aclaró, destacando que incluso algunos bisnietos pueden aplicar en casos puntuales.

En cuanto a la complejidad del proceso, Caballero recomendó buscar asesoramiento profesional. "Yo no dudaría un segundo en pedir ayuda, porque son cuestiones que uno no maneja, se suma la ansiedad y el tiempo corre", advirtió. Y agregó: "Si se pierde la fecha otorgada por el consulado, se queda fuera del juego, porque no hay otra oportunidad".

El consulado español en Buenos Aires amplió su atención de lunes a viernes de 8 a 20 horas, pero aun así se encuentra colapsado. "Todos los días hay cola permanente en Guido 1770", relató Caballero. En ese marco, señaló que organizaciones como el Grupo Migrar, con sede en el Centro Asturiano de Mar del Plata, brindan acompañamiento y asesoría durante todo el trámite, incluso hasta el día de la cita consular.

Finalmente, Caballero insistió en la importancia de no postergar el inicio del trámite: "Quedan apenas semanas, no esperen al 19 de octubre porque ya no dará tiempo a reunir la documentación. Ser español no es solo tener un pasaporte, es tener la posibilidad de ser europeo, la mejor herencia que se puede dejar".