En diálogo con "Pasen y Vean", programa que se transmite de 9 a 13 horas por LU9 Mar del Plata, charlamos con la Dra. Mariana Gordóvil, infectóloga y especialista jerarquizada en infectología, respecto al brote de gripe H3N2 que se registra en Europa y las medidas de prevención recomendadas para nuestro país.

La especialista llevó tranquilidad al señalar que, al menos por ahora, en Mar del Plata y en la Argentina "no tenemos circulación sostenida de influenza, más allá de algunos casos esporádicos". Sin embargo, explicó que el virus de la gripe viene mostrando comportamientos atípicos, con adelantos en los picos de circulación y mutaciones que obligan a mantenerse atentos.

Gordóvil recordó que durante este año se registró un anticipo de la influenza A H1N1, incluso antes del inicio de la campaña de vacunación. "En marzo tuvimos circulación un mes y medio antes de lo esperado, con aumento de consultas e internaciones. Luego, tras la vacunación, apareció el H3N2 en un segundo pico", detalló.

Qué ocurre en Europa y el hemisferio norte

Según explicó la infectóloga, en países como Inglaterra, España, Francia e Italia se observa un aumento significativo de una subvariante del H3N2, conocida como clado K. "Tiene una capacidad de transmisión mucho más alta y genera cuadros gripales típicos, en algunos casos más severos, sobre todo porque impacta en poblaciones que aún no están vacunadas para el invierno", señaló.

Esta situación, agregó, está generando una fuerte presión sobre los sistemas de salud europeos y ya comienza a replicarse en Estados Unidos y Canadá. "Por eso hay una alerta y un trabajo intenso en medidas de control y preparación del sistema sanitario", indicó.

Vacunación y cuidados personales

Consultada sobre la profilaxis y las herramientas disponibles en Argentina, Gordóvil subrayó que quienes se vacunaron contra la gripe este año cuentan con "una protección del 30 al 40 por ciento frente a las complicaciones y las internaciones". En ese sentido, planteó la necesidad de avanzar hacia campañas más tempranas. "No esperar a mayo, sino vacunar desde marzo para adelantarnos en la inmunoprevención", propuso.

Más allá de la vacuna, insistió en reforzar hábitos ya conocidos: "Si uno tiene síntomas gripales, usar barbijo, lavarse las manos, ventilar los ambientes y evitar el contacto estrecho". También advirtió sobre los viajes internacionales: "Puede haber casos importados durante el verano. Si alguien vuelve con síntomas, es importante que consulte y se realice un hisopado para definir conductas específicas".

La importancia de no subestimar la inmunización

En el cierre, la infectóloga remarcó el valor de la vacunación como herramienta comunitaria. "Es una de las medidas inmunoprevenibles más importantes para disminuir muertes, especialmente en poblaciones vulnerables", afirmó. Incluso quienes no tienen enfermedades crónicas cumplen un rol clave: "Tal vez una persona sana no se engripa gravemente, pero convive o cuida a alguien con factores de riesgo. Vacunarse también es proteger a los demás".

Finalmente, recordó que la prevención no se limita a la gripe. "No hay que olvidarse de la vacuna anual contra el COVID, que sigue circulando, ni de la del virus sincicial respiratorio en pacientes de riesgo. Son vacunas que se pueden coadministrar y hay que aprovechar cada oportunidad", concluyó.

La recomendación es clara: sin alarmismo, pero con responsabilidad, sostener los cuidados y la vacunación como herramientas centrales para atravesar la próxima temporada invernal.