A poco más de una semana de que las estaciones de
servicio implementaran una suba cercana al 3 por ciento, los combustibles
volverían a aumentar este fin de semana.
El incremento del 7,7% del impuesto establecido por el
Gobierno a partir de cambios en los combustibles líquidos (ICL) y el dióxido de
carbono (IDC) comenzará a regir este viernes y según informó Nicolás Gandini,
por C5N, ese aumento sería trasladado al valor de la nafta y el gasoil.
Así, de no mediar ningún decreto que posponga la
actualización impositiva, se aplicará el impacto del alza del tributo en los
surtidores, lo que haría aumentar el precio de las naftas entre un 2% y un 3%.
Desde el 16 de diciembre pasado, última suba de
precios en combustibles por estos factores, la cotización del dólar mayorista
aumentó de $82,64 a $84,81, y el valor del barril de crudo pasó de US$51,08 a
US$60.
La semana pasada, Shell, Axion e YPF remarcaron todos
sus precios un 2,9 por ciento, pero para compensar el aumento de hasta el 96%
que el Gobierno autorizó para el biodiesel, base con el que se elabora de la
nafta, por lo tanto, encareció los costos de la producción de combustibles.
De esa forma, la nafta súper en Ciudad de Buenos Aires
pasará a costar más de $70, mientras que la opción de nafta premium más barata
se ubicará más allá de los $81. Las alternativas en diesel, en tanto, partirían
de los 66 y 77 pesos, respetivamente.