En diálogo con "Pasen y Vean", programa que se transmite de 9 a 13 horas por LU9 Radio Mar del Plata, charlamos con Diego Domingorena, presidente del Colegio de Arquitectos del Distrito 9, respecto a la situación urbana de la ciudad, el uso del espacio público y los desafíos de planificación a largo plazo.

El titular de la entidad calificó al año como "muy intenso" y repasó los debates que atravesaron al sector, desde las excepciones urbanísticas hasta los controles y la necesidad de agilizar trámites en el área de Obras Privadas. En ese marco, se refirió a la proliferación de decks gastronómicos en la vía pública, una modalidad que, si bien está habilitada por ordenanza, genera fuertes cuestionamientos.

"Nunca cesó la posibilidad de instalar decks, hay una ordenanza vigente y, si se cumplen los requisitos, se pueden colocar legalmente", explicó Domingorena, aunque aclaró que desde el Colegio mantienen una mirada crítica. "Estamos viviendo una degradación y una mercantilización del espacio público que no es buena ni para los vecinos ni para los turistas", afirmó.

Espacio público en retroceso

El arquitecto amplió su análisis al señalar otros ejemplos que, a su entender, reflejan el mismo problema. Mencionó la falta de acceso libre en las playas y el estado de abandono de fuentes emblemáticas de la ciudad. "La playa es el espacio público por excelencia de Mar del Plata y hoy, si no pagás una carpa o una sombrilla, muchas veces no podés acceder", sostuvo.

También advirtió sobre las consecuencias en la movilidad urbana. "Se generan cuellos de botella en calles y avenidas principales, como Yrigoyen o Belgrano, donde termina pasando un solo auto en arterias clave", señaló, y vinculó esa situación a la "falta de planificación".

Normas, controles y planificación

Respecto a la seguridad de las estructuras, Domingorena recordó que existe una ordenanza que regula estas instalaciones y que el municipio debería exigir informes periódicos de profesionales. "La norma está hecha correctamente; el tema es si se está cumpliendo y controlando como corresponde", indicó.

De cara al futuro, el presidente del Colegio de Arquitectos fue contundente: "Hoy no se está convocando a los colegios profesionales ni a los actores que intervienen en el desarrollo de la ciudad". Y advirtió que el problema va más allá de la circulación o los servicios. "Lo más grave es que ya es una ciudad insustentable e insostenible económicamente. Al extenderse sin planificación, después es imposible sostenerla con los recursos disponibles".

La reflexión final dejó una mirada de largo plazo: pensar Mar del Plata no como era hace cinco años, sino como debería ser dentro de cincuenta. Un desafío que, según Domingorena, requiere decisión política, planificación y una mayor participación de los sectores técnicos en el diseño de la ciudad que viene.